Sociolotron
Sociolotron es un juego de rol multijugador masivo donde podremos explorar el mundo, luchar contra monstruos y completar misiones, como en la mayoría, pero también permite dar rienda suelta a las fantasías sexuales de los jugadores.
Así, el juego permite violaciones, contempla enfermedades de transmisión sexual y hasta embarazos, y todo esto sin demasiados rodeos ni eufemismos. Sus desarrolladores quieren derribar las convenciones sexuales que atenazan a los jugadores en su vida real y en otros juegos: el jugador debe poder hacer lo que él quiera.
Eso sí, la violación y otros delitos que pueden cometerse en el juego, se investigarán. Si pillan al responsable, se le juzgará en un tribunal con un fiscal, un juez y un jurado, papeles que interpretarán otros jugadores, y el acusado puede acabar en la prisión del juego. El juego requiere que los usuarios sean mayores de 21 años.
El juego también nos permite trabajar en la administración pública, como jueces, fiscales o policías, y hasta llegar a ser primer ministro, conquistando los corazones de los votantes o a través de sobornos, chantajes y asesinatos. Otra posibilidad será convertirnos en científicos y, cuando tengamos una cura para una enfermedad, podremos decidir si queremos compartirla con la humanidad o preferimos venderla y reunir rápidamente una fortuna. Los desarrolladores no se olvidan de profesiones más tradicionales como fabricar ropas, armas o muebles y venderlas al resto de jugadores.
El futuro ya está aquí. El que tenga hijos que se prepare.
Así, el juego permite violaciones, contempla enfermedades de transmisión sexual y hasta embarazos, y todo esto sin demasiados rodeos ni eufemismos. Sus desarrolladores quieren derribar las convenciones sexuales que atenazan a los jugadores en su vida real y en otros juegos: el jugador debe poder hacer lo que él quiera.
Eso sí, la violación y otros delitos que pueden cometerse en el juego, se investigarán. Si pillan al responsable, se le juzgará en un tribunal con un fiscal, un juez y un jurado, papeles que interpretarán otros jugadores, y el acusado puede acabar en la prisión del juego. El juego requiere que los usuarios sean mayores de 21 años.
El juego también nos permite trabajar en la administración pública, como jueces, fiscales o policías, y hasta llegar a ser primer ministro, conquistando los corazones de los votantes o a través de sobornos, chantajes y asesinatos. Otra posibilidad será convertirnos en científicos y, cuando tengamos una cura para una enfermedad, podremos decidir si queremos compartirla con la humanidad o preferimos venderla y reunir rápidamente una fortuna. Los desarrolladores no se olvidan de profesiones más tradicionales como fabricar ropas, armas o muebles y venderlas al resto de jugadores.
El futuro ya está aquí. El que tenga hijos que se prepare.